El enojo ha sido una de las emociones que más han presentado las familias que han perdido a un ser querido a causa del coronavirus ya que una persona al ingresar al hospital no puede ser cuidada, no puede ser despedida ni se puede darle el último adiós en una funeraria o en el panteón.

¿Cómo afrontar el duelo en tiempos de COVID-19?

-Negación: Hay negación porque no se vio al familiar y aparecen pensamientos sobre sí será su familiar. Aquí lo más difícil es no haber estado en la sala de espera del hospital en los últimos momentos.

-Enojo: Surgen pensamientos como el por qué le tocó si hay gente que realmente no se cuida.

-Tristeza: Viene la culpa, el familiar piensa que no hizo nada más que estar al pendiente del teléfono o solo orar. Se minimizan los esfuerzos al no haber estado cerca del paciente en el hospital.

-Negociación: Es la etapa en que el familiar se da cuenta que no pude hacer nada más por él o ella, porque si lo hacía, corría el riesgo de contagiarse y así, contagiar a más familiares.

-Aceptación: Al recibir las cenizas del ser querido, la familia comienza a trabajar en la aceptación de su ausencia.

-Anticiparse al dolor: Los rituales de velación también han sufrido modificaciones a causa de la pandemia del coronavirus, puesto que se ha evitado dar el último adiós a ese ser querido en las funerarias o panteones.